ZENIT.org (entrevista de Miriam Díez i Bosch)
Nos hemos encontrado con Marie Oates en la sede del Opus Dei en Nueva York. Su deseo de mostrar cómo viven las mujeres el carisma del Opus Dei ha dado como resultado su libro
Escrito en colaboración con Linda Ruf y Jenny Driver (Crossroad Publishing, 2009), los perfiles del libro presentan desde una doctora por Harvard a mamás amas de casa, pasando por una graduada en el Massachusetts Institute of Technology (MIT).
De este modo el volumen presenta a las "mujeres de la más intrigante organización del catolicismo".
De este modo el volumen presenta a las "mujeres de la más intrigante organización del catolicismo".
Finalmente alguien habla sobre las mujeres en el Opus Dei. Las mujeres integran la mitad —algunos creen que mucho más de la mitad— del número total de miembros del Opus Dei en Estados Unidos y en el mundo, pero la mayoría de la gente no les conoce a ustedes. ¿Por qué esta falta de protagonismo?
Como parte de la Iglesia católica, el Opus Dei existe para ayudar a hombres y mujeres laicos a encontrar y amar a Dios a través de su trabajo —cualquiera que este sea— y los acontecimientos diarios que llenan una vida normal. Pero tener una vocación al Opus Dei no cambia el hecho de que sus miembros siguen siendo simples fieles laicos, iguales a otros fieles de la Iglesia católica.
Las personas en el Opus Dei no van haciendo alarde de su vocación al Opus Dei. En general, intentan centrarse en ser "chicos o chicas normales" con sus colegas, familia y amigos, intentando al mismo tiempo ser más parecidos a Cristo en su trabajo y con cualquiera con quien entren en contacto. En este sentido, cada uno se esfuerza personalmente en dar gloria a Dios y dar un testimonio cristiano por el modo en que hacen su trabajo y por sus relaciones personales.
Los lectores encontrarán que hay mucho "protagonismo" —como también imperfecciones y defectos humanos— entre las mujeres presentadas en el libro.
Cada una es la protagonista de su único y personal esfuerzo por vivir su llamamiento a la santidad como persona laica.
Cada una es la protagonista de su único y personal esfuerzo por vivir su llamamiento a la santidad como persona laica.
¿Hay un prototipo de mujer del Opus Dei?
No. Como verán los lectores, las mujeres que se presentan en "Women of Opus Dei: In Their Own Words" son todas únicas.
Las mujeres del libro, como todas las mujeres —y hombres— en el Opus Dei, provienen de todas las clases sociales. Cuatro de las 15 mujeres presentadas en el libro son convertidas al catolicismo. Tres de ellas tienen una herencia afroamericana; algunas provienen de ambientes asiáticos e hispanos. Algunas son madres y amas de casa, un importante trabajo profesional estimado como tal por San Josemaría Escrivá. Algunas son madres que llevan adelante sus familias y otras profesiones.
Hay una científica, un par de doctoras —incluyendo una de las fundadoras del Hospice Movement en Estados Unidos—, profesionales de servicios hospitalarios, del cuidado de niños, algunas educadoras, la presidenta de un college para mujeres, la directora ejecutiva de una organización sin ánimo de lucro, etc.
Hay una científica, un par de doctoras —incluyendo una de las fundadoras del Hospice Movement en Estados Unidos—, profesionales de servicios hospitalarios, del cuidado de niños, algunas educadoras, la presidenta de un college para mujeres, la directora ejecutiva de una organización sin ánimo de lucro, etc.
La mayoría de las mujeres están casadas, algunas solteras. Lo que comparten en común es su vocación, que es la misma llamada sin importar sus circunstancias diversas.
Aunque cada una tiene sus propios defectos y luchas personales, como cualquiera, todas aman profundamente su fe católica y encuentran que su vocación al Opus Dei las ayuda a querer, vivir y comunicar dicha fe más fácilmente.
Las mujeres (y los hombres) en el Opus Dei son católicos normales que quieren responder cada día al profundo amor y bondad de Dios.
El Opus Dei, ¿ofrece algo característico a las mujeres en términos de formación, formas de comportamiento?
La formación ofrecida por el Opus Dei, una prelatura personal de la Iglesia católica, simplemente se hace eco de la formación cristiana recomendada por la Iglesia para todos los fieles, hombres y mujeres. Los programas cristianos son los mismos para hombres y mujeres, aunque se llevan a cabo de forma independiente para cada uno.
La independencia de los programas de formación de las mujeres de aquellos de los hombres ha sido sobre todo parte del carisma fundacional que San Josemaría recibió de Dios. Funciona con eficacia en las actividades formativas del Opus Dei, pero puede que no sea así para otras organizaciones católicas.
La independencia de los programas de formación de las mujeres de aquellos de los hombres ha sido sobre todo parte del carisma fundacional que San Josemaría recibió de Dios. Funciona con eficacia en las actividades formativas del Opus Dei, pero puede que no sea así para otras organizaciones católicas.
Entiendo que uno de los rasgos distintivos de la formación es que es ofrecida por laicos y sacerdotes. Intenta ser práctica para ayudar a la gente a vivir las virtudes cristianas en su lugar de trabajo, en sus actividades diarias normales.
En su libro es imposible encontrar la afiliación política de las mujeres. ¿Está hecho a propósito o simplemente no entraba en el tema?
Está hecho a propósito porque no importa. Déjeme explicárselo. Se anima a los miembros del Opus Dei, como seres humanos libres, a ser ciudadanos responsables, a votar, a interesarse por la política pública que les afecta a ellos y a los demás en los diferentes países y comunidades.
Es decir, los miembros del Opus Dei son completamente libres en el asunto del voto, la política, la afiliación a un partido político, etc. El Opus Dei es totalmente apolítico. Sus fines son completamente espirituales. La gentes en el Opus Dei tienden a extenderse en todo el abanico político, algunos son liberales, algunos son conservadores, algunos son moderados, etc. Como católicos devotos, suelen compartir puntos de vista similares en los "temas calientes" de moral como el aborto, la eutanasia, la ética sexual, la justicia social, la bioética, etc., todos los cuales tienen repercusiones políticas.
No obstante, se les anima a decidir en este y en otros temas de política pública de acuerdo con su conciencia. No hay una postura única que adopte la gente en el Opus Dei cuando considera estos y otros asuntos de política. Como cristianos, rezan y reflexionan sobre los temas, y luego asumen sus propias decisiones políticas basadas en las opciones que tienen a su disposición.
¿Considera usted que estas mujeres representan al Opus Dei que pensó el fundador, San Josemaría Escrivá?
Me gusta creerlo así. Estas mujeres son todas normales, no son perfectas, pero se han comprometido a luchar cada día por mantener a Jesús al frente y en el centro de sus vidas. Todos somos "obras en fase de creación" hasta que morimos.
Nuestra existencia sobre la tierra es una peregrinación mientras caminamos en el tiempo hacia nuestro destino definitivo: la vida eterna con Dios. Dios nos da el tiempo aquí en la tierra para cultivar los talentos que se nos han dado y para sacar lo mejor de ellos a su servicio y al servicio de las almas que nos rodean.
Creo que San Josemaría estaría contento con la dedicación, el empeño y la diversidad de estas mujeres y de las miles no incluidas en este libro.
Es probable que, si las tuviéramos a todos juntas en una habitación, no las felicitaría por estar en el Opus Dei, más bien las desafiaría a ser mujeres más valientes. Las animaría a intentar ser más generosas en su amor a Dios y en el espíritu de servicio. Las impulsaría a soñar apostólicamente con una visión del mundo, a seguir luchando para ser mejores, a convertirse diariamente.
Él solía decir sobre sí mismo que, personalmente, había desempeñado el papel del hijo pródigo cada día de su vida, y que la mayoría de nosotros necesitamos tener cada día pequeñas y grandes conversiones, volviéndonos hacia Dios.
Quizá el rasgo que defina a las mujeres que se comprometen DE VERDAD en el Opus Dei sea la VALENTÍA. En lo demás, son como el resto de la población, con sus virtudes y sus defectos. Esto es, son normales.
ResponderEliminarTienen una vocación y adquieren un compromiso. En la sociedad actual esto es casi intolerable. Pero ahí están ellas, muchas veces para asombrarnos con su fe.